La participación fue
bastante importante, ya que sólo hubo tres perros no ring. Especial
mención para Antonio Ortiz, a quien una avería mecánica impidió
llegar a la Exposición. Entre los Groenendael, el mejor cachorro me
pareció un perro prometedor y entre las clases de adultos poca
homogeneidad, con algunos ejemplares ya muy conocidos, en buen
estado de forma y dignos competidores y en general con buen
carácter.
Los Tervueren más
numerosos, me parecieron más homogéneos, sin duda las condiciones en
las que se desarrollaron los juicios influyó en el comportamiento
de algunos ejemplares en ring, de forma que algunas presentaciones
adolecieron del brío necesario. En todo caso, comparando las clases
abiertas con las de jóvenes y cachorros se puede apreciar un ligero
retroceso en la calidad, especialmente en cuanto a la tipicidad de
las cabezas. Mención especial para la cachorra ganadora, muy bella y
muy completa para su edad, sin duda muy prometedora. Me sorprendió
muy gratamente la hembra Tervueren que resultó mejor ejemplar: buena
cabeza, bella expresión, muy buena corpulencia, excelente
construcción, marchas impecables y excelente carácter. |