Propuestas del Vocal de Trabajo/Utilidad aprobados en Junta Directiva de 19 de Septiembre y 1 de Noviembre de 2009

 
     
 

Creación del Título Sujeto de Utilidad. Al no contar actualmente con dicha denominación y  con el interés de crear una cabaña de ejemplares, desde la fecha actual hasta Septiembre de 2010, permitir recibir esta denominación a los ejemplares que sean propiedad de un socio del CEPPB, tengan el Grado Máximo de cualquier reglamento oficial de utilidad (RCI, Mondioring) o que sea oficial en un pais de la FCI y admitido por la asociación canina del mismo (Ring Francés en Francia, Ring Belga en Bélgica, etc…) y que obtengan la calificación de Bueno en Monográficas de Zona, Especial Regional ó Especial de Cría.

A partir de Septiembre de 2010 serían considerados “Sujeto de Utilidad” los ejemplares que cumplan los siguientes requisitos: 

-Ser propiedad de un socio del CEPPB

-Tener el diagnóstico libre de displasia

-Haber obtenido una calificación de Bueno en Monográfica de Zona, Especial Regional ó Especial de Cría.

-Haber superado el Grado I en prueba RCI o Mondioring

- Para las hembras será suficiente haber superado el Test de Selección Utilidad del CEPPB.

 

 Modificación del Título de “Sujeto Seleccionado de Utilidad.

Lo será todo perro que cumpla las siguientes condiciones:

-Ser propiedad de un socio del CEPPB

-Tener el diagnóstico libre de displasia

-Haber obtenido dos veces la calificación de, como mínimo, Bueno, una en Monográfica de Zona ó Especial Regional y la otra en la Especial de Cría con dos jueces distintos

-Haber superado el Grado III en prueba RCI o Mondioring.

 

Creación del Título “Reproductor Superior de Utilidad Categoría A

Para los machos, todo perro que, siendo Sujeto Seleccionado de Utilidad, tenga 5 o más hijos Sujetos seleccionados de Utilidad.

Para la hembras, lo serán aquellas que sendo Sujetos Seleccionados de Utilidad, tengan 3 o más hijos Sujetos Seleccionados de Utilidad.

Será condición indispensable que los hijos mencionados sean producto de dos uniones con dos ejemplares distintos.

 

Creación del Título “ Reproductor Superior de Utilidad Categoría B”

Para los machos, todo perro que siendo Sujeto de Utilidad, tenga 5 o más hijos Sujeto Seleccionado de Utilidad.

Para las hembras, lo serán aquellas que siendo Sujetos de Utilidad, tengan 3 o más hijos Sujetos Seleccionados de Utilidad.

Será condición indispensable que los hijos mencionados sean producto de dos uniones con dos ejemplares distintos.

 

 Test de Selección Utilidad

 

Este test es una prueba pensada para aquellos propietarios que deseen incluir a sus perros dentro del sistema de Cría de Utilidad, bien porque sean participantes de reglamentos deportivos que no sean de selección (Obediencia Clase Internacional, Agility), porque sean perros con cualidades reseñables pero su objetivo está en competiciones de belleza o porque sean hembras de cría a las cuales se les quiere aprovechar en reproducción y se desea resaltar sus cualidades.

Se divide en tres partes, una primera de socialización, una segunda de sensibilidades y una tercera de ejercicios de protección, entendidos estos no como ejercicios de agresividad, ni que acrecienten la misma, sino que sobre la base del trabajo deportivo, midiendo las cualidades instintivas del perro, su coraje y temple nervioso, así como el control del guía y el autocontrol del perro.

En cualquiera de las tres fases, cualquier muestra de agresividad sobre las personas, el miedo o la pérdida de control eliminan al perro del test.

Se realizará con correa de un metro y con un collar que no esté demasiado flojo (que no salga de la cabeza) pero que no esté en posición de ahogo y no tenga púas de ningún tipo.

La parte C, Protección, se realizará aparte de las partes A y B.

La prueba debería ser juzgada por un “Juez de Selección” y los figurantes deberían ser “Figurantes de Selección”, todos ellos nombrados por la Comisión de Utilidad del CEPPB.

Podría valorarse la posibilidad de convalidar las partes A y B a los perros que hayan realizado la prueba BH, que ya es en sí una prueba de obediencia y socialización, haciendo que estos perros realicen sólo el ejercicio 4 (disparos) y la parte C completa para superar el Test de Selección.

 

Parte A, SOCIALIZACIÓN

 

Comienza con el guía presentándose al juez, dando su nombre y el de su perro, un comisario comprobará la identificación del ejemplar.

 

Ejercicio 1, Encuentro con perros  (10 puntos)

 

Se situarán en el campo un mínimo de tres perros (pueden ser el resto de los participantes o parte de ellos, haciéndose la valoración de todos ellos para éste ejercicio). Los guías caminarán dejando una separación entre perros de unos tres metros, los perros deben permanecer tranquilos, la máxima puntuación sólo la obtendrá quien se mantenga tranquilo ante los demás perros, si gruñe, ladra un poco o es miedoso será insuficiente o deficiente, si es demasiado agresivo será descalificado, así como si se muestra con excesivo miedo o sumisión.

 

Ejercicio 2, Encuentro con ciclistas, patinadores, gente que corre, algún vehículo o algo que ruede que no sea habitual (carretilla…)  (10 puntos)

 

El perro se cruzará en paseo al menos con tres situaciones diferentes, la máxima puntuación sólo será para el perro que se mantenga indiferente, que el perro preste atención y siga acompañando a su dueño no se considerará defecto. Se sancionará que se asuste, gruña o ladre (esto último con insuficiente o deficiente), si se pone muy agresivo o es excesivamente miedoso será descalificado.

 

Ejercicio 3, Encuentro con un grupo de personas (10 puntos)

 

Durante el paseo, perro y dueño se encontrarán con un grupo de personas (al menos cuatro) y deben pasar por entre ellas, para volver sobre sus pasos y saludar a un integrante del grupo, mientras el resto se mueve alrededor (a unos tres metros). La máxima puntuación la obtendrá el perro que sea indiferente, aquel que se aparte de la gente o se suba a ellos será defectuoso, el que gruña o muestre miedo será insuficiente y quien se muestre agresivo o excesivamente miedoso será descalificado.

 

Parte B, SENSIBILIDADES

 

Ejercicio 4, Disparos (10 puntos)

 

Perro y guía se situarán en el campo parados y con la correa floja, desde unos quince metros, un ayudante realizará dos detonaciones de seis milímetros, con un intervalo de cinco segundos una de otra. La máxima puntuación sólo será para el perro que se muestre indiferente, si presta atención pero no tiene reacción de miedo o agresividad, no será considerado defecto, si reacciona de manera clara,  deben restarse puntos, si intenta huir, gruñe o ladra el ejercicio será insuficiente o deficiente, si se pone muy agresivo o entra en pánico será descalificado.

 

Ejercicio 5, Ruido sorpresivo (10 puntos)

 

Cambiando la situación del ejercicio anterior, a unos diez metros del perro y guía se produce un ruido fuerte (caída de objetos, chocar de latas, botes rellenos de piedras, carraca, etc….). Se valorará como el ejercicio anterior.

 

Ejercicio 6, Juego en un entorno incómodo (10 puntos)

 

El guía juega con el perro con un motivador, pelota o cualquier objeto que quiera, durante el juego, arrojará el juguete entre un grupo de cajas, bidones, bolsas rellenas, globos unidos, dentro de un lugar recóndito y oscuro…cualquier situación que al juez le resulte apropiada), el perro debe acudir rápido y buscar su juguete con decisión. Si duda pero al final entra a buscarlo, se le restarán puntos, si no entra perderá todos los puntos.

 

Parte C, PROTECCION

 

Ejercicio 7, Defensa del conductor (20 puntos)

 

El guía se acerca con el perro sujeto por la correa hacia un escondite donde hay un figurante vestido con protecciones y armado con una caña de bambú abierta de forma longitudinal de la misma manera que las que se utilizan en deportes de ring; a unos seis metros se detiene y da un comando para poner el perro en alerta, a una orden del juez, el figurante sale del escondite hablando en tono fuerte y haciendo gestos violentos, cuando esté a mitad de camino entre el escondite y el guía, el juez ordena soltar al perro y el figurante presenta la protección clara para la mordida, el perro debe intervenir con decisión e interceptar al figurante con una presa firme, el figurante debe dejar al perro morder amenazando con el bastón en alto para, una vez haya afirmado la presa, hacer una carga sobre el perro, sacudiendo el bastón por encima del perro, pero sin golpearlo, sólo intentando impresionarlo, a la orden del juez, el figurante se inmoviliza, y en ese momento el guía da la orden al perro para soltar la presa (el perro debe vigilar al figurante quedando a su lado), a partir de aquí el figurante no puede volver a moverse y el perro no puede volver a morder. Se acepta una segunda orden de suelta, si no lo ha hecho a la  primera, pudiendo aún el ejercicio ser válido, si debe darse una tercera orden para el suelta, el ejercicio será insuficiente, si no suelta a la tercera será descalificado. Si rehúsa a morder o antes o durante la carga, será descalificado.

Tras esto y a la orden del juez, el guía acudirá hasta su perro y lo sujetará del collar, retirándole la correa, si esta ha permanecido puesta.

Durante la fase de carga y antes de la mordida, el guía puede animar a su perro.

 

Ejercicio 8, Prueba de coraje (20 puntos)

 

A la orden del juez, el figurante dará dos pasos atrás despacio para ponerse lejos del alcance del perro y acto seguido se alejará corriendo hasta una distancia de unos treinta pasos, allí se detendrá y encarará al perro y guía, amenazando y haciendo ruido con la caña , el juez ordenará al guía soltar al perro y este debe de correr hacia el figurante decidido y rápido, el figurante presentará la protección para la mordida pero podrá interponer el bastón (barrage) para impresionar al perro, aunque debe siempre permitirle entrar a morder y tiene prohibido golpear al perro con el bastón. El figurante, cuando el perro esté a unos diez pasos, podrá también hacer una pequeña carga hacia delante pera impresionarle. Si el perro no entra a morder en primera instancia, el figurante debe actuar como en el primer ejercicio, levantando el bastón y permitiendo morder, aunque en este caso el ejercicio será considerado insuficiente. Mientras el perro muerde la protección, el figurante iniciará una carga sobre el mismo intentando impresionarlo, sacudiendo el bastón por encima pero sin golpearlo hasta que el juez le ordene detenerse, en ese momento el guía da la orden al perro de soltar la presa (el perro debe vigilar al figurante quedando a su lado), a partir de aquí, el figurante no debe volver a moverse y el perro no puede volver a morder. Se acepta una segunda orden de suelta, pudiendo aún el ejercicio ser válido, si debe darse una tercera orden para la suelta, el ejercicio será insuficiente, si no suelta a la tercera será descalificado. Si rehúsa a morder antes o durante la carga será descalificado.

El guía puede alentar y animar a su perro durante todo el ejercicio.

Tras esto, y a la orden del juez, el guía recogerá al perro colocándole de nuevo la correa y se presentará al juez para escuchar el rapport del trabajo de su perro.

 

 
 

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